¿Para qué tantos poemas?, ¿Para qué tantas letras sangrantes? ¿Para qué te amo si se que jamás me besarás ni me mirarás? ¿De qué sirve escribirte, si se que nunca mis escritos leerás? Hasta que respondas estas preguntas hasta entonces seguiré afirmando : NO me vuelvo a enamora