Mucha cosa, mucha emoción, mucha ocupación.

 Momento especial, lindo, confuso, demandante. En estos momentos es cuando las cosas importantes hacen sentido, otras se acomodan en el cajón de la estupidez . Me importa todo y no me importa mucho nada. Lo que es, es y lo que no, ay qué pena contigo... No puedo con tanto así que me concentro en lo que hace falta. Hay etapas para todo, para estar más adentro, más en uno, más alerta a uno mismo casi como egoísta por un rato, mucho menos preocupado por la mirada ajena. La vida hoy a mi me pasa por un rato bien compartido y una soledad que todos a ratos sentimos, por un amor que dura, por una amistad que no calcula. No me importa tanto compartir lo malo, quiero compartir lo bueno, la risa, una canción y un vino. Cada tanto me encuentro en estos rincones conmigo misma, dónde no puedo negar lo obvio ni olvidar lo que de verdad me hace bien al alma.

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